Hola, tengo 28 años, vivo en Santiago y quería comentarles un poco de mi experiencia con respecto a la psicoterapia con Manisha. Personalmente en un principio me costó mucho creer que esto me podría ayudar en mi vida y mucho menos con los problemas que arrastraba de años, pero sabía que necesitaba ayuda. Así que decidí darme la oportunidad de creer que me serviría y esforzarme a poner de mi parte y trabajar en cada sesión que asistía.
Mauro, 28 años
Al pasar a la 3era y 4ta sesión, ya más confiado en que esto si estaba resultando, empecé a trabajar en mis fortalezas y cualidades y comencé a sentirme mejor. Luego, ya más confiado en el buen trabajo, me entregué por completo a mis sesiones individuales, permitiendo conocerme al 100% y confiando en mis capacidades, pude enfrentar mis más terribles miedos y empezar a resolver mis conflictos internos y problemas.
Aprendí a perdonar, a tener amor propio, también a aceptar las cosas tal cual se presenten en la vida y a tener siempre una mirada optimista.
Hoy en día amo mi vida y recomiendo totalmente la psicoterapia que entrega Manisha.
Nunca había estado con un psicólogo hasta ahora. Pensé “¿para que servirá ir al psicólogo para bajar de peso”?, pero quise darme la oportunidad y probar ya que me lo habían recomendado y había visto sus resultados.
Paulina, 57 años
Realmente puedo dar fe que sirve y que fue muy bueno para mí, ya que pude contar cosas de mi vida que había cerrado ya que eran muy dolorosas para mí, y me ayudo a darme cuenta de muchas cosas y a sentirme mejor conmigo y forjar un nuevo futuro con menos culpas y valorarme más.
Pude darme cuenta poco a poco del “peso” que cargaba y como lo fui disminuyendo a pasar del tiempo haciéndome cargo de mi historia.
Hoy todo esto sigue en proceso para mejorar cada día y llegar a ser mi mejor versión tanto física como mentalmente.
Cuando llegué donde Manisha me encontraba sobrepasado de problemas, con gran estrés laboral, conflictos no resueltos con mi padre y en una relación muy poco sana con una persona con problemas de abuso de drogas, mentiras y algunas cosas más.
Anónimo, 40 años
En el tiempo en que Manisha me atendió, me dio herramientas para manejar mejor el estrés y mis estados de ánimo. Me ayudó a trabajar en la sanación de antiguas heridas y me orientó en cómo mantenerme suficientemente fuerte y centrado como para poder acompañar al otro en su proceso, pero también para poder protegerme al mismo tiempo.
Fue un proceso difícil, sobre todo por mi resistencia a ciertos temas y tareas. Pero me quedo con la sensación de que fue un esfuerzo bien invertido, en gran medida por la empatía, comprensión y confianza libre de juicios demostrada por Manisha.
Muchas gracias Manisha.
Quiero contarles lo positivo que fue el proceso psicoterapéutico grupal con la Sra. Manisha.
Fernando, 56 años
Cuando llegué a la consulta, tenía 35 años de consumo de alcohol ininterrumpido, llegué inseguro, pero con ganas de mejorarme y sentirme bien. Manisha me recibió invitándome a ser parte de las terapias grupales que realizaba. Me ayudó a aprender sobre mis dolores y que es lo que tapaba con el alcohol en mi vida. Aprendí sobre la adicción y comencé a re-descubrirme como persona.
Poco a poco fui volviendo a ser una persona digna y libre de consumo con la ayuda de la terapia individual y grupal.>br>
Hoy llevo 3 años y 8 meses sin consumo. Me siento muy bien y orgulloso de lo logrado. De repente se presentan problemas, pero aprendí a resolverlos sin acudir al consumo.
Recomiendo totalmente la ayuda recibida, pero para lograr el cambio uno tiene que poner el 100%. Confirmar en uno mismo y también en la profesional. Este proceso ha significado mucho para mí, ya que hoy puedo levantarme cada día libre de consumo y enfrentar la vida de forma diferente.
No tengan miedo en pedir ayuda y ponerse en manos de una tremenda profesional. Les aseguro que su vida cambiara.
Mi experiencia en terapia ha significado mucho para mí. Hoy me encuentro bien, totalmente de alta. Sin remedios ni nada parecido, pude salir de la relación tóxica en la que estaba. Aprendí a quererme y ver a la persona que no lograba ver. Estaba sumergida en un gran sufrimiento. Llegué a creer que me merecía el maltrato, que yo era la culpable de su enojo, que mejor no decir nada para que él no se alterara. Pero me di cuenta de que no era así. Me costó mucho entender como la persona que decía que me amaba me podía tratara así. Al punto de creer que era mi culpa. No podía entender cómo podía amar a una persona así. Al punto de no saber si era amor o costumbre. Hasta que empecé a ver las cosas de otra forma. Mi actitud cambio y hasta él se sorprendió, lo aleje de mi vida y empecé a salir adelante.
Anonima, 35 años
Aparte del tema de pareja, me di cuenta de otros temas que también pude trabajar. Aprendí a conocer mejor a las personas y saber cuándo confiar en ellas. Aprendí a disfrutar mis momentos de soledad. Disfruto leer un libro tranquila, del silencio, de ver una película o escuchar música. Comer lo que desee y no preocuparme tanto por si me veo linda o fea, más gorda o más flaca, vivo la vida como a mí me hace sentir bien.
Hoy trabajo en lo mío, ejerciendo de forma particular. Vivo en otro lugar, lejos de la casa que compartía con mi ex pareja. Soltera, sin compromisos, pero feliz viviendo esta etapa como mujer. He retomado mi especialización en la universidad. Puedo decir que me siento Feliz con lo que he elegido y una de esas elecciones fue hacer terapia con Manisha. Muchas gracias de verdad.
Mi experiencia de terapia fue bastante peculiar. Era de las personas que decía que “ir a conversar tus problemas con otros no resolverá nada”. Esto se debía a una independencia autoinculcada producto de numerosos problemas familiares vividos durante mi infancia.
Felipe, 23 años
Teniendo esto en contexto, una de las crisis más importantes que he experimentado fue cuando decidí independizarme del hogar debido a maltratos físicos y psicológicos. Esto me llevo a deambular de familiares a conocidos con un rumbo incierto hasta que di con un familiar que me obligó a ir a sesiones psicológicas por mi bien estar. Es aquí cuando conocí a Manisha, la psicóloga que tanto me comentaba mi familiar.
Estaba bastante tranquilo en mi primera sesión, pues pensaba que sucederían las típicas escenas clichés de -y esto como te hace sentir-. Pero conocer cómo sería la metodología de conversación, me lleno una sensación agradable. Pues si bien, expresaría mis emociones; cosa que no soy muy bien haciendo, el ambiente de la sala me llenaba de seguridad.
Al comprometerme al ir una vez a la semana sabía que tenía un día esperando para desahogarme. Las horas se me pasaban volando sentado en ese sillón, ya que ahí podía expresarme como quisiera sin sentir remordimientos. Liberé traumas que tenía de niño y pensamientos muy personales. Comentaba de mis metas y mis sueños, y lentamente agarraba confianza para resolver los problemas que me llevaron a ese estado en un primer lugar.
El haberme dado de alta de las terapias me hizo recordar los principios que alguna vez había olvidado. Pude enfrentar la situación que había vivido con mis padres y comentarles sobre las decisiones que tanto daño me habían causado. Aprendí a comprenderlos y aceptarlos como son.
Si bien existían cosas que se me dijo que ya las sabía, al expresarlas ayudo a conocerme desde una perspectiva interior la cual mantenía bloqueada. Si algún día volviera a pasar por alguna situación difícil no dudaría en acudir a Manisha y poder trabajarla en conjunto.
Gracias, de verdad.
Un día, como cualquiera, yo estaba muy mal anímica y psicológicamente, no quería vivir, solo me entregue al trago y pastillas, en esos momentos solo dormía y no comía nada, sentía que mi vida no tenía sentido. Hasta que un día me llevaron a un lugar, ahí encontré la felicidad, me atendió una psicóloga llamada Manisha Dadlani comencé mi terapia individual, ella me acompaño todo el proceso, iba pasando el tiempo y yo cada vez mejor, cerramos círculos nocivos, aprendí a poner límites, y a quererme a mí misma, sus terapias eran tan profundas y llenas de cariño.
Doris, 66 años
Hoy en día es difícil encontrar una profesional, empática, donde no emite juicios, dispuesta a ayudar en todo momento, se entrega completamente a su trabajo.
Fue pasando el tiempo, mi mejoría fue increíble, 2 años y medio con abstinencia total. Hoy día soy otra persona, gracias a mi psicóloga Sra. Manisha. La verdad nunca terminare de agradecerle, su profesionalismo, logro sacarme de esa oscuridad en la que estaba metida.
Doy mi testimonio para que sepan que hay profesionales de la salud que entregan y hacen con amor su trabajo y que la aman con todo su corazón. Gracias Manishita.
Todos tenemos cosas bajo la superficie que no vemos o no queremos ver. Es difícil aceptar que alguien más nos ayude con esto.
Julia, 27 años
Cuando vi que dentro de mi plan para bajar de peso se consideraban algunas sesiones de psicoterapia, la verdad no pensé que sería como fue.
Es fácil decir “estoy bien”, sin reflexionar un segundo más en eso. Es típico aceptar que se tiene un “problema” con la comida, pero cómo saber el origen de ese problema y cómo sanarlo. No es algo que nos cuestionamos diariamente y muchas veces caemos en círculos viciosos que nos dañan y muchas veces sin darnos cuenta.
La psicoterapia me ayudó a bajar las barreras que me impedían visualizarme y escucharme, aceptarme y quererme más. Además de hacer un esfuerzo por reconciliarme con mi pasado y con las personas que pudieron influir en mi autoimagen y autoestima. Aprendí estrategias y me hice consiente de las cosas que me pasan.
Manisha es una excelente profesional. Acogedora y cálida, realmente me ha ayudado a conectarme conmigo misma y trabajar las cosas que me afectan profundamente para poder sanar y tener una mejor vida.
Que alguien nos ayude a mirarnos y sanar es un tremendo recurso para ser felices.
Le agradezco infinitamente.
Quiero contar en breves palabras como fue mi proceso de rehabilitación por problemas de consumo de alcohol.
Marcela, 49 años
Tuve la gran bendición de llegar donde Manisha Dadlani, y digo bendición ya que ella fue un angelito que pusieron en mi camino. Llegué en muy malas condiciones, cero autoestima y sin ni un interés de seguir viviendo. Estaba en un hoyo muy grande y no veía salida alguna. Traté varias veces de suicidarme, y la última vez me encontró mi marido colgada. Afortunadamente me encontró y busco ayuda y llegamos donde Manisha, mi querida Angelita (Isha), quién se dedicó al 100% a mi recuperación, con su cariño, dedicación, mucha empatía y con un gran profesionalismo.
Ella me entregó todas las herramientas para poder continuar y trabajar mis problemáticas, enseñándome lo valiosa que yo era, la gran persona que soy, me enseñó a utilizar varias herramientas para trabajar en mi problema de consumo, herramientas que aún uso y es mi gran acompañante de vida.
Logré salir adelante y hoy soy una mujer empoderada, que toma sus decisiones por sí misma y he aprendido a ser feliz.
Siempre la recuerdo y la recordaré, fue uno de mis pilares más importante para enfrentar mis obstáculos, Sin ella no lo hubiese logrado. Doy gracias a Dios el haberla encontrado. Eternamente agradecida por su cariño y constante apoyo en mi rehabilitación. Es una excelente profesional y guía. Gracias por todo, siempre estaré agradecida por su tremenda entrega, escucha, paciencia y sabiduría.
Antes de empezar mi terapia con Manisha, pensaba que tenía unos problemas gigantes. No sabía cómo manejarlos ni cómo estar cerca de la gente que me producía esta ansiedad.
Alejandra, 29 años
Ahora, con el tiempo que llevo en terapia, agradezco toda la ayuda que Manisha me ha brindado. Me ayudó a darme cuenta que las herramientas que necesito para ser quien quiero ser y estar donde quiero estar siempre estuvieron a mí alcance, pero dejaba que los problemas me nublara la vista. Aún siento que hay mucho trabajo por hacer.
Cada vez que llego a una sesión, siento como si no tuviera gravedad, y que las cosas que me generan ansiedad me llevan fuera de la estratósfera. Pero Manisha es como mi cable a tierra, me guía, alienta y motiva con sus palabras. Que la gravedad la manejo yo, que la dueña de mi cuerpo y de mi mente soy yo, y al final con las sesiones siento que estoy de nuevo con los pies en la tierra. Con una vista sin neblina y una visión más clara para mí.
Sin duda estoy muy agradecida por toda la ayuda que Manisha me ha brindado.
Hola gracias por darse el tiempo de leer mi testimonio, posiblemente te puede ayudar.
Luis, 54 años
Fui una persona que consumía de todo, empezando por el alcohol y otras sustancias más fuertes (policonsumo). Llegué a perder grandes valores que mi familia de origen me había entregado. Consumía todos los días para tener placer y felicidad. Al final me di cuenta que era todo lo contrario. Me destruí por completo, me creía dueño del mundo. Era indolente y mentiroso hasta que un día toque fondo, intoxicado por las sustancias, y en un momento de reflexión me di cuenta que no quería más, no quería vivir así y le pedí ayuda a mi amigo Jesús que nunca me abandonó. Ya no podía más con esta coraza que me había puesto, él me envió a una Sra. llamada Manisha Dadlani.
Yo no creía en psicólogos, decía “yo, con mis 54 años, sabía mucho de la vida, que me iban a enseñar ellos”, pero estaba equivocado.
La entrega, la paciencia y la ayuda que me bridó Manisha y mi perseverancia de no dejarme vencer, acompañado siempre por mi amigo Jesús, nunca dejé de tener fe.
El proceso de psicoterapia individual me hizo cambiar mi estilo de vida. Volví a retomar grandes valores que había perdido. Comencé a respetarme, quererme, valorarme como persona, aprendí a poner límites, a cambiar todas mis amistades, y amarme todos los días. Poco a poco comencé a tomar el dominio de mi vida. Aprendí a perdonar y a pedir disculpas a todos las personas que les hice daño, y lo principal, a escucharme, conocerme y perdonarme. Me di cuenta de mis malas decisiones y a responsabilizarme de mis actos. Aprendí a no culpar a nadie y comencé a tomar el protagonismo de mi vida.
Todos los días es un encuentro con mi persona. Trabajo la humildad, la empatía y asertividad. Busco factores protectores que son mi familia, hijos, esposa, madre, hermanas y ahora dos nietas. Tengo una mejor calidad de vida y cada día me amo más, y así también amo a las personas que me rodean.
Estoy muy agradecido de mi psicóloga Manisha. Aunque no quiero depender de ella porque las herramientas y valores que logré recuperar con mi proceso me tienen que servir para caminar libre de sustancias en esta hermosa vida que he vuelto a retomar.
Le agradezco a diario a mi amigo Jesús que nunca me abandono. Hoy llevo 5 años de abstinencia total y estoy feliz junto a mi familia.
Que DIOS los bendiga para tomar siempre las mejores decisiones para sus vidas.